La norma UNI 11061, la llamada ley DOT, sigue siendo una referencia para todos los fabricantes europeos, que define los métodos correctos de uso, montaje y almacenamiento de los neumáticos para mantener inalteradas sus características técnicas a lo largo del tiempo.
Por lo tanto, la respuesta es no, los neumáticos no tienen fecha de caducidad: cuando los neumáticos están bien conservados y solo han recorrido unos pocos kilómetros, pueden hacerlo incluso con una antigüedad de 10 años.
Por otro lado, cabe destacar que la duración está influenciada principalmente por las condiciones de uso, es decir, la combinación del estilo de conducción y el vehículo en el que se encuentra el neumático montado. Además, a las condiciones de uso se deben agregar las condiciones de almacenamiento, especialmente en el caso de neumáticos que no se han utilizado durante algún tiempo, en el almacén o en el garaje.
La temperatura, la luz, la posición en la que se almacenan los neumáticos en desuso pueden tener efectos importantes en la calidad del producto: un neumático almacenado incluso durante algunos años pero en condiciones menos que óptimas podría quedar inutilizable. Por el contrario, existen buenas prácticas que te permiten alargar la vida del mismo.
Por qué saber la edad de tus neumáticos
Tal y como establece el Código de Tráfico y Seguridad Vial, los neumáticos montados en los vehículos en circulación deben estar en perfecto estado de funcionamiento, libres de lesiones que puedan comprometer la seguridad. Quienes circulen con los neumáticos desgastados podrán ser objeto de una sanción que puede ser muy alta, con la deducción de varios puntos del carné de conducir.
Pero, sobre todo, para tener la seguridad de viajar en un vehículo fiable, ágil y con buen comportamiento en carretera, es importante vigilar el desgaste de los neumáticos.
Un control periódico de la banda de rodadura, hoy aún más fácil gracias a la inserción de un bloque de color, sigue siendo un buen hábito, estemos o no cerca del cambio periódico de neumáticos. La posibilidad de conocer la antigüedad del neumático supone poder disponer de más información, que puede resultar de gran utilidad, especialmente en el caso de la compra de un coche antiguo o un vehículo que lleva mucho tiempo parado.